Se termino la semana santa, y con ella las vacaciones de los críos (y de los profes eh, jaaja), los largos días de fiesta, las tradiciones, y volvemos a la vida cotidiana y rutinaria, o lo que es lo mismo, a trabajar. Yo además de volver a currar volveré a entrenar, tras una semanita en la que al final he salido dos días en bici y dos a correr, eso si, sin ningún afán de entrenamiento y con el único objetivo de disfrutar, pero toca volver a ponerse las pilas de cara a Gijón, y ver si un duatlón de mas de cuatro horas ha dejado muy destrozadas mis piernas, o me permite mínimamente defenderme y entrenar para el campeonato de España de duatlón. Esta semana santa he aprovechado para estar por casa y disfrutar de otras cosas que no hago cuando estoy empeñado en pelearme con el crono, y me imagino que como yo muchos de vosotros habréis aprovechado estos días para pasar mas tiempo con la familia y devolverles el tiempo robado para entrenar, y sin embargo otros habréis exprimido estos días para devorar horas de entreno en busca de mejorar para vuestros objetivos. Yo personalmente cierro hoy domingo una semana para enmarcar, en la que he vivido momentos muy buenos desde el pasado sábado, y en la que me he dado cuenta de que no solo del “dorsal” vive el hombre. Saludos a todos y esta semanita vuelta a los entrenos.
GENIAL LA VISITA AL MONASTERIO DE PIEDRA, 100% RECOMENDABLE
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